sábado, 12 de enero de 2008

Cuatro de Tres

Si, se parece en algo a la frase de Piratas del Caribe III, y en algo tiene sentido. Creo que ya está mas que demostrado el hecho de la unión entre yo y mis hermanos (la Triada) y aunque falta explicar también esto a nivel butiano deseaba comentarles sobre un cuarto integrante.

Cuando nos mudamos a Lurín a inicios de los noventas mi padre nos dijo que un primo de él vivia a una cuadra de nuestra casa. Esta familia consta de 3 mujeres y 1 varón y mis tíos. Bueno resulta que nuestro primo en segundo grado es nuestro contemporáneo y cuando saliamos a la playa o al parque le pasabamos la voz para que nos aconpañara. Hay que reconocer que nuestras familias no tenian un gran apego, pero aun así se insistía.

Al tiempo, nosotros creciendo, estas invitaciones se hicieron más frecuentes y las aceptaciones más aún. Tanto fue así que ni bien tocabamos su timbre él aparecía por su asotea y nos decía cuando se demoraría en desocuparse (bien estudioso nos resultó) o si ya bajaba para salir. Comenzaron las epocas de 1 horita de Play, varias horas en la playa, una horita jugando fulbito (esta era la menor de las actividades) lo cual obviamente incremento conforme más creciamos.

LLego el punto en que nosotros ya no lo buscabamos, sino él mismo venía a pasarnos la voz. Fueron epocas dichosas, yo aún no trabajaba formalmente, ellos estaban de vacaciones de verano y el tiempo fluía a su antojo.

Sin embargo comenzé a trabajar, él comenzó a prepararse para la universidad, mis hermanos tenian que seguir la secundaria. Sin embargo a la oportunidad de reunirnos, lo haciamos.

El cambio brusco sucedió cuando él postuló a una beca en medicina para Cuba. Obviamente la concigió y viajó. Fue un duro golpe para nosotros pero entendimos que es parte de la vida. Él regresaba por 4 o 5 semanas al año y aprovechabamos ese tiempo pra reunirnos 1 o 2 veces (es decir los 4, siempre habian 1 o 2 libres para juntarse) y sucedió una anecdota que paso a contarles:

Era un domingo y la Triada estaba en casa, después de una tarde en la playa. El Cuarto había salido donde unos familiares o tenía que recibir a algunos en su casa (no lo recuerdo) pero en resumen no pudo estar con nosotros. Para las7pm apareció y comenzamos a pensar que se podría hacer y de las ideas surgió el interes por ver alguna pelicula más por Lurín no hay cines. Luego de mucho debatir en una aranque de locura total se decidió ir a LarcoMar, inmeditamente él fugó a su casa y a los 5 minitos regresó cambiadito para salir. Fuimos al paradero, tomamos combi hasta el puente Benavides. De ahi un taxi para Larco y cuando llegamos se nos quitó las ganas de ver alguna pelicula, fuimos a Bembos y tragamos hasta no poder más, luego unas paseaditas y muchas pero muchas fichas de Moy (somos 4 fanáticos de lso videojuegos), al final unos heladitos para rematar la noche. Los helados fueron como a las 0.30 am del lunes.

Ya regresar a Lurín fue puro taxi nomas. LLegamos tarde, llenitos de comida, y contentos a más no poder. Recuerdo que en esa epoca pesaba 80 kilos jejejeje realmente flaco comparado a los 108 de hoy dia.

No se exactamente a cuanto ascendió la cuenta, pues yo era quien trabajaba esas fechas y mis hermanos y el cuarto estaban de estudiantes. No me importó gastar con el fin de que todos nos divirtamos sanamente.

Hoy en día el cuarto ya esta en Lima, casado con una cubana, ya recibidio de doctor y con mucho sobrepeso de cuando era joven. Si algo no ha cambiado es que cada vez que se puede se hace el intento para que nos juntemos todos.

Un abrazo en la distancia primo!!!

B&B,para servirlos.

PD: Él también tuvo su bud, pero sucedieron cosas por las que lo perdió.

1 comentario:

Anónimo dijo...

UNO MAS QUE MAS DA!
TOTAL SI EL MUNDO ME AGUANTA PORQUE NO LA TRIADA...???

JEJEJEJEJEJE...

ALGUN DÍA...
ALGÚN DÍA...
REPETIREMOS ESOS EPISODIOS Y QUIZÁS SEAMOS MÁS

UN FUERTE ABRAZO